Para el encuentro y el reencuentro. Análisis, reflexión y debate de temas sociales, políticos y culturales. Donde la poesía y la crítica conviven al ser presentadas con el sabor del fundamento.

lunes, 13 de enero de 2014

La crisis no es más que NUESTRA crisis

por: América Parés F. 

Oigo decir, entre quejas y reclamos efervescentes, que continúan las guerras, que se acabó el respeto, que la vida no vale nada; que el dinero ya no alcanza, que no conseguimos alimento. Que nos quedemos sin agua, que no hay electricidad, que la inseguridad nos arropa… que la justicia no llega.

Pero es muy sencillo andar por la vida señalando las culpas y no asumir las pequeñas, medianas y grandes responsabilidades. Y aunque difícil parezca, no es una tarea imposible, se trata de saber enfrentarlas con todo lo que eso traiga consigo.  

Hoy el Zulia tiene la más importante y sentida lucha ambiental y social contra la Carboeléctrica, la cual se pretende habilitar en medio del Río Socuy, utilizando carbón del Guasare como combustible fósil para generar los megavatios de energía que se requieren, en vista de la grosera demanda que exige la sociedad –todo esto según los planes presentados por entes gubernamentales de la región-.

 Sin embargo, de llegar a instaurarse esta bomba de tiempo, traerá profundas e irreparables secuelas con el desplazamiento y el posible exterminio de las comunidades indígenas de la localidad que se resistan, así como la desaparición forzada de la biodiversidad por las devastadoras extracciones de suelo y la grave contaminación de las aguas que son de consumo humano y que están depositadas en Manuelote y Tulé. ¿Eso te suena familiar?


No existe justificación alguna, más allá de intereses mezquinos y económicos,  para que la minería del carbón sea más importante que evitar a toda costa los daños ambientales y mantener a salvo el patrimonio de nuestras etnias ancestrales.

Cuando se supo del atentado donde perdió la vida el Cacique Yukpa Sabino Romero, sentí que la Tierra también lo lloró. Hoy la resistencia de Sabino lleva impregnado el trazo del carbón que pretende arrastrar a la muerte a cientos de miles de especies vegetales, animales y humanas.   

La CRISIS

La crisis no es más que una dificultad, un conflicto. Interno o externo, pero que sigue siendo un hecho que altera o deforma las conductas humanas, y que solo en algunos casos maravillosos tiene el poder de transformar para bien. Hoy tenemos crisis que combinada con casi todo: crisis mundial, crisis social, crisis de valores, crisis económica, crisis alimentaria, crisis inmobiliaria, crisis sanitaria, crisis ambiental,  crisis energética.

La Tierra, nuestra más perfecta y equilibrada superficie, es el espacio con autenticas garantías que tenemos para sobrevivir. Hoy ella implosiona desde sus ardientes venas al atravesar sus mares y océanos; agita sus fuertes vientos para limpiar el enorme descontrol que contamina el flujo en sus cielos y se abre paso desde sus capas tectónicas para reordenar  lo que  le han quitado.

No conforme con ello, hoy también la Tierra explota. Explota de ira y pesar de madre cuando los bosques son víctimas del ecocidio, cuando su biodiversidad agoniza y se extingue, cuando dejan morir sus lagos, ríos y mares. Sigue así su pesar cuando explota de desconsuelo profundo al sentir que extraen sus recursos naturales y no se escatima el mismo esfuerzo para ayudarla a renovarse y poder descansar.  

Las alteraciones planetarias, provocadas mayoritariamente por la mano del hombre, se hacen más y más visibles. Ya nuestro hogar natural presenta síntomas graves de sus males adquiridos. La energía que encierra está siendo despilfarrada sin escrúpulos. La humanidad no termina de entender que, aunque las necesidades sociales sean infinitas, los recursos naturales no lo son.

Cuando se trata de la Tierra la crisis es de todos (as).

La actividad minera del carbón también es un estado de crisis. Es nuestra crisis en el Zulia. ¡ALTO CON LA CARBOELÉCTRICA! Más agua, más vida, más Sierra de Perijá. ¡Otras formas de energía son posibles sin contaminar al ambiente y sus pueblos!